Nati, explotada sexualmente desde los catorce años. Mayo 2013.
“Yo empecé a los catorce años porque no fui a la escuela, porque mi madre trabajaba y yo le cuidaba a mis hermanos. Un día una prima mía me dijo: ‘Mirá, yo estoy trabajando y es salir con personas mayores; si a vos te gusta, no te estoy obligando, pero por lo menos para tener lo tuyo y no precisás estar dependiendo
de tu familia’. Fue la primera vez que salí con ese hombre, él me pagó y yo le seguí. Fue un hombre mayor, un desconocido, en la calle, el de la camioneta paró y nosotros nos subimos, sin conocerlo nos fuimos con él. Esa fue mi primera vez, fue por las necesidades. Eso no lo quiero para mis hijos”.